domingo, 5 de septiembre de 2010

re-evolución.

no se siente el fuego en este lugar. acá tampoco che. el placer escondido en el ropero, un gusto a naftalina. de a poco algo va surgiendo, muy de a poco. una sonrisa, un laburo y un viaje sin pasaje de vuelta por un buen rato. estamos todos a punto de perder el control, pero algo te sigue agarrando contra el pasamanos.
estás parado en la mitad del colectivo, colgado, con la mirada perdida en la mochila de NTVG del flaco que está sentado contra la ventanilla. los auriculares a todo lo que da y mientras lo dejan sordo a él, te cantan directo a vos.

esa ideita de la primavera, de que va haciendo menos frío y quién te paga el amoxidal post viernes a la noche y mil grados bajo cero?
cómo no, decís mientras le dejás lugar a la señora que se baja sin pestañear y no entendés por qué se baja si está tan lindo ahí adentro tan confortablemente adormecido tan lleno de.
hipnotizado con la nada, dormido en el 144 lleno de lluvia del martes a la tarde.

tus ojos siguen sin tropezar con nada excepto las siglas de la mochila que vibran con los adoquines de calle alvear y ni te das cuenta que hace veinte recuerdos que te deberias haber bajado.
hace mucho que estás muerto te sigue cantando al oído ese uruguayo que nunca viste.

1 comentario:

HormigaO dijo...

Sr. Florencio...lo estimo.